Lo mágico del rugby inclusivo
Tras el fin de semana seguro que no te han faltado noticias que giran en torno al último gol de Messi o Griezmann, la enésima polémica arbitral o puede que cualquier otro aspecto morboso y díscolo del ámbito deportivo. Pero quedémonos también con Eric, con una de esas enfermedades raras llamada Síndrome de Apert, o con Adrián y su convivencia diaria con un retraso madurativo y la ansiedad.
A Rubén siguen dándole pánico los partidos de rugby, pero en cada ocasión que puede lucha por vencer sus miedos y lo va consiguiendo, como pueden demostrar los que conviven con él en cada uno de los entrenamientos o compromisos que afronta en este deporte. Y hasta que el rugby entró en su vida, a Lucía no le apetecía moverse. Solo comía y estaba encerrada en casa. Pero ahora, tras la convivencia con el resto de compañeros y compañeras, ya es una más del grupo, con el consiguiente impacto positivo en su salud física y psicológica.
Son solo algunas de las historias que alberga una cita de rugby inclusivo como la que este pasado domingo se celebró en Valencia. Con nombres reales unos y ficticios otros, este reportaje también busca poner el foco sobre esos chicos y chicas que cada día dan una lección de vida a los facilitadores como Gonzalo Álvarez (Les Abelles) y demás personas que colaboran, las cuales tienen la enorme suerte de ver cómo evolucionan en cada una de sus actividades.
Aquí el resultado no importa, ni cuantos ensayos se consigan. Se trata de no hacerse daño, y sobre todo de convivir en torno a los valores que rezuma el balón ovalado. Un ‘arma’ en positivo, una herramienta que les hace ser personas mucho más preparadas tanto dentro como fuera del campo.
“Nosotros aprendemos más de ellos”
Manuel Blasco, ‘Nelo’, es una de las personas de confianza del proyecto de rugby inclusivo que alberga la estructura de Tatami. Conoce de sobra una idea que se plantó en Torrent y que ha crecido hasta llegar a la ciudad de Valencia, y concretamente al seno de este histórico club. Y fue precisamente este pasado fin de semana, aprovechando que los primeros equipos de Tatami y Les Abelles se medían en División de Honor B, cuando encontraron la fecha idónea para dar forma a un evento que debe tener un gran futuro por delante.
“El torneo CAPAZ surgió gracias al apoyo de la directiva de Tatami, pero además teniendo también a Les Abellescon sección de rugby inclusiva y al TRI Cullera. Es un torneo de inclusión, y por eso hoy con nosotros también estaba invitada gente del Rugby Club Valencia y de otros clubes que están empezando”.
“Han traído jugadores y facilitadores desde el RC Castellón o el CR San Roque, y damos paso a otros clubes para que dentro de sus estructuras también puedan tener una sección o equipo de rugby inclusivo en un futuro cercano”, añade ‘Nelo’, que actúa de facilitador (la denominación que se dan a sí mismo los entrenadores de rugby inclusivo) durante los partidos.
Sobre los valores, virtudes y beneficios que aporta estar en contacto con el rugby inclusivo, pocos mejor que él para explicarlo de forma directa: “Enseña que todos somos iguales, que no hay diferencias. Cuando estamos en el campo somos todos iguales”.
Verdaderamente aprendemos que no hay discapacidad, sino que unos tienen unas virtudes y otros tienen otras, pero al final cada uno da lo mejor de sí mismo. Todos aprendemos, nosotros de ellos y ellos de nosotros, pero nosotros más de ellos si cabe”, resalta.
“Estos chicos y chicas nos han dado una gran lección”
Lo dice Rosa Molero, directora general de Infancia y Adolescencia en la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, que no faltó a una cita que con tanto mimo prepararon los clubes y organizaciones implicadas, como la Federación de Rugby de la Comunidad Valenciana.
“Lo vivido hoy es muy importante porque representa todos los valores que intentamos retomar y que tienen que ver con la inclusión y la capacidad, que son valores fundamentales y además son derechos. El ocio educativo es la herramienta más potente que puede haber para la inclusión y para la igualdad de oportunidades”, señala.
Bajo su punto de vista, “el deporte cambia vidas” y eventos como el que aquí reflejamos, el I Festival de Rugby Inclusivo Ciudad de Valencia (Torneo ‘CAPAZ’) “da a conocer que existe una forma de trabajar que no es competitiva en el sentido negativo del término, sino que es cooperativa”.
Estos chicos y chicas nos han dado una gran lección practicando un deporte como el rugby, con las connotaciones de cohesión social y el trabajo en equipo que atesora, con ese tercer tiempo tan particular”, concluía a las preguntas de Yosoynoticia.es sobre el mismo césped del campo del Río de Valencia.
Un lugar que no tuvo ni vencedores ni vencidos. Porque todos ganaron, desde los jugadores hasta el último facilitador o colaborador en los diferentes proyectos que se unieron para sacar adelante el torneo. Ver las caras y las emociones de los chicos y chicas que jugaron el partido, y conocer de qué manera tan positiva impacta el rugby en sus vidas, ya es una recompensa tan grande que todo lo demás pasa a un segundo plano.
Artículo de www.Yosoynoticia.es